Este artículo fue publicado originalmente en la pagina SUBALTERNO el 24 de Diciembre del 2010. Lo republico en este blog para mantenerlo disponible, y bien guardado.
El próximo 25 de diciembre se estrena en México la película “TRON Legancy” y el equipo de Subalterno.net tuvo la oportunidad de ver esta cinta horas antes de su estreno… no pregunten como lo hicimos, baste con decir que nos aseguramos de borrar muy bien todas nuestras huellas digitales. Y aquí están nuestras impresiones.
Cuando fui a ver “TRON Legancy”, secuela de la original “TRON” de 1982 iba mentalizado a que obviamente no me iba a impresionar de la misma manera que cuando vi la original hace muchos años. De hecho honestamente iba en una actitud condescendiente para con la película, pues es bien sabido que casi ninguna segunda parte es mejor que la primera.
Aun así esta nueva entrega de la saga TRON resulto ser una experiencia bastante interesante. No mejor, ni peor que la primera, simplemente diferente.
Pues bien, he de decir de antemano que, voluntariamente, me había mantenido, durante todo este tiempo, al margen de la información que había salido acerca de esta secuela de TRON, y vaya que los productores, me la pusieron difícil, pues el estreno de la película se vio pospuesto mucho tiempo.
Fue así que llegué a la sala de cine sin ningún antecedente respecto a los trailers, entrevistas, teasers o reportajes de la prensa respecto a lo que iba a ver en la pantalla, a lo mucho solo vi algunas de las imágenes que salieron a principio de año y que ciertamente levantaron grandes expectativas en mí.
En los primeros momentos de la película recibí el primer impacto, aparecía entre las penumbras la silueta de lo que se presumía era el protagonista de la película original Kevin Flynn, claro esta visto entre las penumbras, uno suponía que se trataba de un doble simplemente para introducir al personaje de su hijo que sería el protagonista de esta película.
Y de repente nos muestran, en primerísimo plano, el rostro de Jeff Bridges, no como todos lo conocemos, sino tal y como lucía en 1982 al momento de filmar la original. Lo primero que pensé es que quizás habían recuperado metraje de la película original para rehacer la escena, pero seguido a esto, nos muestran un carrusel de imágenes de el propio Jeff Bridges en distintas situaciones como introducción de la película, lo cual hacia imposible que se tratara de metraje rodado 28 años antes, a menos que se hubiera planeado esta nueva película desde entonces.
Fue entonces obvio que se trataba de un efecto por computadora, que según averiguamos después se trata de la aplicación de esta tecnología más osada que se ha hecho jamás, porque si bien es verdad que en “El extraño caso de Benjamin Button” se reconstruyo con una técnica similar la cara de Brad Pitt para hacerlo parecer mas joven.
En el caso de Avatar se logró no solo recrear a todo el elenco, sino a un planeta entero, en el caso de “TRON” lo que se buscó fue construir una copia exacta del rostro de un actor para que luciera exactamente igual a como lució en una película anterior, para lo cual se basaron, no solo en el TRON de 1982, si no de varias películas que Jeff Bridges filmó también por esas fechas.
El resultado final es que, en ocasiones tu cerebro si puede notar que se trata de una cara generada por computadora, sobre todo en las partes en las que el personaje generado por computadora habla, pero en ocasiones la fusión del CGI con la escena real es tan perfecta, que ni aún sabiendo que se trata de un efecto especial logras encontrarle ningún atisbo de irrealidad. Lo que sigue es lógico, dentro de unos 5 ó10 años estaremos viendo personajes por computadora que no podremos diferenciar de la realidad.
Este simple detalle es tan impresionante que los demás efectos especiales, al menos para mí, pasaron a un segundo plano. Baste con decir que la película cumple con todas las expectativas de cualquier fan de la saga, nos muestran todo lo que vimos en la primera versión obviamente con las técnicas de este siglo, la apuesta visual que hicieron respecto al mundo digital resulta bastante interesante, alejándose del cliché al que nos había acostumbrado Matrix de ambientes verdes con código corriendo por todos lados.
Podríamos decir que visualmente la primera entrega de TRON es como cuando de niños jugábamos con muñequitos y simulábamos batallas con ellos, y a su vez esta nueva entrega visualmente nos muestra todo lo que ocurría adentro de nuestra mente de niños. Las nuevas tecnologías nos han dado la ventaja en ese aspecto.
Como dije en un principio, yo iba mentalizado de antemano al hecho de que, de ninguna manera esta película me iba a dejar con la impresión como en aquella primera ocasión hace muchos años. Pero al salir de la sala de cine ya no estaba tan seguro, creo que en la actualidad las nuevas tecnologías pueden impresionarnos de maneras en las que ni siquiera nos damos cuenta.
Pensemos que, la original película TRON, en su momento fue muy poco valorada por la misma temática que trataba, nadie en aquel entonces supo ver que en realidad especulaba respecto a un futuro tecnológico que si bien concretamente no resultó ser como el retratado en la película, metafóricamente ya anunciaba el complemento hombre maquina y la suma importancia que la información tendría en estas ultimas décadas, al punto de ser esta la era de la comunicación.
Me pregunto si dentro de 20 o 30 años, no estaremos comentando sobre Tron Legancy como la película de culto, que en su momento nadie supo ver como marcó un parte aguas en la producción cinematográfica, al ser la primer película en la que un actor se interpretó a si mismo cuando era joven. Proyectando así un futuro en el que para los actores ni siquiera la edad o la propia muerte, son obstáculos ya para interpretar cualquier personaje en cualquier película.
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